Es bastante normal que haya en casa alguna reja que tenga marcas de óxido, ya que se trata de un elemento que está expuesto al clima durante todo el año. Aun así, podemos proteger nuestras rejas para que duren más tiempo, aplicando tratamiento anticorrosivo correctamente y haciéndole mantenimiento constante.
El metal se oxida por diversas razones: el ambiente y el clima general deteriora el material, la compasión de la reja (desde su estructura y confección hasta otras pinturas aplicadas) o por no aplicar el producto correcto que puede debilitar el metal desde adentro.
Antes de comenzar el cuidado de nuestras rejas, tenemos que tener dos aspectos en consideración:
- Aplicar los productos correctos: en el mercado hay una enorme variedad de productos, pero recomendamos dejarse asesorar por expertos que le puedan recomendar el más indicado. En Reinco tenemos el cromato de zinc, un fondo de inhibición de corrosión que proporciona una película protectora para resistir toda clase de oxidación. Y el fondo 2 en 1 ideal para herrería y metales. Es un anticorrosivo con base de resinas sintéticas y pigmentos metálicos que brindan resistencia a la humedad que pueden atacar superficies metálicas.
- Hacer mantenimiento regular y constante de las rejas para mantenerlas en buen estado: la regularidad dependerá de las condiciones generales, pero lo clave es hacerlo varias veces para asegurar su durabilidad.
Acá les dejamos algunos consejos para el cuidado de las rejas:
- No apliques ningún producto en condiciones extremas.
- Haz pruebas antes de aplicar algún producto.
- Limpia la superficie.
- Lija el área en caso de haber rastros de óxido.
- Usa una brocha limpia y sin residuos.
El cuidado de tus rejas es tan importante como cualquier área del hogar; son parte de la cara de nuestra casa y merecen el mejor cuidado y los mejores productos. En Reinco estamos para acompañarlos durante todo el proceso y selección.